1967 Spider-Man Episode 19*
¡Volvimos al cine! Después de dos años alejados de las salas por culpa de un mal biológico de una región asiática que empieza por "CH" y rima con Bina, al fin sentimos el calor cultural del cuarto oscuro, con la pantalla que se mide en pies, las cotufas recalentadas de ayer y los imbéciles que no apagan el celular antes de la función.
Ese ritual de culto que el streaming –que nos mantuvo comatosos durante 24 meses– nunca podrá reemplazar por más pulgadas que tenga tu pantallita casera. Fue un ejercicio de catarsis el volver entrar al templo donde las películas se hicieron para verse –ni tablets ni celulares, por Júpiter– que habría besado el suelo de no ser por las cotufas pisadas sobre la alfombra pegajosa. Y no pudo ser mejor que con una cinta que nos llenase de emociones como lo hizo magistralmente Spider-Man: No Way Home.
Luego que Endgame concluyera una década casi perfecta de una conjunción planificada y coherente del Universo de MARVEL Comics, el MARVEL Cinematic Universe ha entrado en un período de incertidumbre sobre la dirección de su nueva y cuarta etapa donde busca reinventarse con un nuevo argumento que lo sustente.
Es triste que se fueron de culo durante el inicio de la fase 4 que ha tenido que ser subsidiado por series de TV que van de lo mediocre (WandaVision, Falcon and the Winter Soldier y Loki), a lo medianamente entretenidas durante el oscurantismo que nos obligó a subsistir a base de Netflix y Disney+.
En donde las primeras cintas que abrieron el Phase Four del MCU han sido poco menos que bodrios genéricos plagados de mensajes y agentas políticas progre (Shang-Chi, The Eternals y Black Widow, anyone?), con poco sabor artístico y mucho hedor a sequía creativa tras la lamentable partida del incomparable genio de Stan Lee ¿coincidencia?
Si DC Comics no aprovecha este momento de flaqueza de su rival en el cine, sería un desperdicio para el DCEU. El 2022 parece le pinta muy bien augurio con 'The Batman' y 'Aquaman and the ost Kingdom', sólo espero que no cometan otro error como el de 'Wonder Woman 1984' que ni para streaming vale la pena ver.
Es con un gusto enorme que les recomiendo que no dejen de ver en la pantalla grande a Spider-Man: No Way Home, porque es el residuo retroactivo que restaba concluir de la fase 3, con tal grado de excelencia, que no pude contener mis emociones olvidando evaluar críticamente el film. Me sentí como aquel quinceañero que cambiaba comic books en los kioscos de Chacaíto por allá en los '80 y '90.
Spider-Man: No Way Home recoge todo lo bueno que recordamos de esa época dorada de las tres primeras fases del MCU, que te embriaga de nostalgia a la vez que te brinda una luz de esperanza por las tres series que aún restan por concluir de la fase 3, me refiero a las respectivas trilogías de Ant-Man, Doctor Strange y Guardians of the Galaxy.
Pero ¿qué hace tan buena a Spider-Man: No Way Home? Pues un guión tan soberbio que sólo puede ocurrir una vez dada su ambición que se expande sobre el universo contenido del MCU para abarcar hacia el pasado pre existente de la franquicia de our friendly neighborhood Spider-Man que ha tenido varias revisiones.
Supongo que está basado someramente en comic "One More Day" (MARVEL #544-545, 2008) por las extremas similitudes en la base de los argumentos entre el film y el comic. Me limitaré a decirles, para evitar spoilers, que Spider-Man: No Way Home es un crossover impecable del Hombre Araña del MCU con el universo 'no canon' de las dos franquicias del super héroe que le preceden a ésta.
En sinopsis y basado en el teaser trailer que fue lo único que me permití ver antes –ya que como saben me he vuelto adverso a los trailers modernos que revelan demasiado en calidad de resumen– Spider-Man: No Way Home sigue los acontecimientos como consecuencia directa de Far From Home que deja al descubierto público la identidad de Peter Parker como el enmascarado arácnido de los Avengers.
Esto deja al Avenger adolescente en un comprometido foco de la atención mediática que le impide continuar con una vida privada normal. Sintiéndose obligado a requerir de la ayuda de Doctor Strange para revertir el presente modificando el pasado. Pero todo se va a la mierda creando una ruptura de las barreras que separan los múltiples universos, trayendo a algunos villanos de las películas anteriores de Spider-Man pre-MCU al universo del protégé del desaparecido Tony Stark.
Me limitaré a sólo mencionar a los actores que encarnan los villanos que se mostraron en los trailers y a más nadie por respeto a garantizarles un mínimo de sorpresa. Sólo sepan que ver al Spider-Man más reciente luchar contra los villanos de las viejas cintas, todos representados por sus respectivos actores originales, es un exégesis nerd que los hará ejacular de una emoción incontenible en plena sala. Lleven preservativo aparte de la mascarilla puesto que les deparan otras sorpresas de gran magnitud que explica por qué me refiero a este film como una oportunidad única que no se repite con facilidad.
No es un acto de saturar una película arrojando locuras a libre albedrío sin sensatez argumental, porque el guión está muy bien estructurado que hace de sus casi 150 minutos un deleite que se deja fluir en un ritmo balanceado que acelera el pulso durante escenas de acción climática, calmadas a ratos por momentos de conexión emocional entre sus personajes que encuentran redención a lo que parece el cierre digno de una Era.
Gracias en parte que que le tocó al Director Jon Watts cubrir los tres films de la saga "Home" del Spider-Man del MCU, privilegio que ningún otro cineasta ha podido jactarse dentro de las series particulares de cada superhéroe dentro del MCU (sólo James Gun podrá igualarlo si dirige la tercera de Guardians). Esto garantiza una homogeneidad humorística por encima de la constancia de los actores donde se mantiene el mismo elenco liderado por el muy carismático Tom Holland, acompañados por los no menos locuaces Jon Favreau y Marisa Tomei desde el principio (y antes, si recordamos que algunos debutaron en la igualmente excelente Captain America: Civil War). Con el invitado estelar de Benedict Cumberbatch como el hechicero multi-dimensional.
Si se han percatado de las imágenes, como en los trailers, me permito mencionar el lujo de tener reunidos a Jamie Foxx, Willem Dafoe y Alfred Molina y son los únicos que les mencionaré porque fueron parte de la promo, pero hay más, muchos más; este ensamble está muy bien argumentado y con tal meticuloso cuidado como el que vimos en la también brillante X-Men Days of Future Past.** Sumen excelentes efectos digitales con buena música incidental del siempre increíble Michael Giacchino y tienen garantizada una de las mejores del MCU que ni siquiera pertenece a la fase cuatro porque es del SPS-MCU.
Qué buena forma de volver a las salas, salir cargado de energía emocional como si fuera un niño. Spider-Man: No Way Home es el film altamente recomendable con el sello de Rural Tex como la cartelera de la semana. Vayan a verla en cine, por favor.
(★★★★★★)
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Barton
[*] SPOLIER! The episode named "Double Identity" where the infamous Internet meme of "Spider-Man pointing at Spider-Man" spawned. This alone would give up a big spoiler if you read between the lines.
[**] La diferencia entre el potencial caos de saturar demasiados actores Lista-A con personajes primarios/antagónicos en una adaptación de largometraje y el de una orquestación armónica con buena administración de tiempo de cámara, está y siempre va a recaer en un buen Director, punto. Por esto es que films como Spider-Man: No Way Home y X-Men: Days of Future Past son el resultado de Directores capacitados y competentes como Jon Watts y Bryan Singer, respectivamente, en lugar de apostar por inexperimentados como Chloé Zhao en la fallida Eternals, independiente de las irrelevantes estatuillas que ostenten como símbolo de popularidad fortuita.
