Thunder! Flash!
Thor es uno de esos personajes del universo Marvel que conozco poco y que le di muy poco seguimiento durante mi larga trayectoria como lector de comics (apenas lo he leído como parte de los Avengers). Parte por la cual no tuve la iniciativa de siquiera esperarla en el cine con el mismo fervor que tengo con otras adaptaciones pendientes para este verano, como Capitán América (no aguanto) y por supuesto, Linterna Verde (me estoy muriendo). Sin embargo varias señales me apuntaron a ver Thor ayer, señales que me decían que esta producción no era una adaptación de segunda como Dare Devil y Elektra (asco). La primera, la avalancha de críticas positivas y no sólo de la comunidad comic, sino de los críticos en general; la segunda, me enteré que el Director detrás del proyecto fue Kenneth Branagh quien no acostumbra a embarcarse en burdos blockbusters debido a su inclinación dramática y conservadoramente literaria.
Mi sorpresa fue grata desde el inicio al fin. Thor es una rara adaptación, fiel al comic en lo somero, donde se conjugan elementos que regularmente se alejan de este tipo de género. Una dirección de lujo –con Branagh a la cabeza no ha de sorprender– apoyado en actuaciones de altura no reservadas a las figuras de renombre y un guión de cinco estrellas que si bien se ajustó al comic en lo superficial, posee grosor argumental que le da profundidad y coherencia al personaje basado en la mitología nórdica (que inspiró a Stan Lee y el desaparecido Jack Kirby para este poderoso Avanger).
Si bien el argumento de Thor acumula pastiches de varias de sus series desde que debutó en Marvel en 1962 (un año antes que los X-Men), el film presente conjuga un buena introducción al presentarnos el legendario personaje como aparece en el comic. Un arrogante hijo de un "Dios" que es enviado a la tierra en castigo para aprender a ser humilde antes de tomar posesión de su derecho real al trono de Asgard. Sólo que dista del comic donde originalmente Thor se apodera del cuerpo de un médico lisiado llamado Don Blake (pero ese nombre se lo dan en el film de cualquier manera). Sin embargo, el foco del film es sin duda conectarlo con el resto del universo Marvel, que ya tiene adaptaciones a la pantalla grande como antesala a lo que será la mega producción "The Avengers" para el próximo año. Sólo falta Captain América: The First Avenger.
Por esa razón la trama tiene un fuerte énfasis en S.H.I.E.L.D. y su Agente Coulson quien ha aparecido en todos los films de Marvel representados por el mismo actor (Clark Gregg: Iron Man). En especial que al final de los créditos, si se esperan como buenos cinéfilos, verán un segmento que tiene a Samuel L. Jackson en su rol de Nick Fury y quien igualmente ha aparecido en todos los films de Marvel como el futuro líder de los Avengers y S.H.I.E.L.D. (de pana, la película de The Avengers va a patear todos los culos de aquí a Ganímedes). Con esa intención encontrarán referencias a Iron Man y Hulk para mantener la coherencia del contexto donde coexisten los miembros de The Avengers.
Lo que consolida su guión bien escrito, que concatena dos tramas en paralelo con impecable secuencia, es la dirección de Branagh y su orquestación de los personajes que transmiten emociones, carisma y mucha química espontánea. Sin ser una joda, el film es tan ameno como serio y la causa cae en la construcción de los personajes a cuestas del Director y los actores. Aquí la fórmula de Superman (1978) funciona al incorporar figuras cartel para dar soporte a los protagonistas que en su mayoría son rostros frescos y desconocidos (si recuerdan el clásico film del hijo de Krypton, Marlon Brando y Gene Hackman fueron necesarios para dar marco serio al debutante e inmortal Christopher Reeve). Con lo anterior me refiero a Anthony Hopkins (The Wolfman, Fracture, The Silence of the Lambs) y Lolita Natalie Portman (Black Swan, The Other Boleyn Girl, My Blueberry Nights) que imponen la fuerza de atracción primaria dentro del elenco dramático. Que no pierde balance ni le roba cámara a los Asgardianos Thor y Loki, representados por Chris Hemsworth y Tom Hiddleston respectivamente y que en mi opinión resultaron más impresionantes en su actuación que en su pinta ajustada a sus personajes. Ni hablar de roles menores donde se dieron el tupé de desperdiciar a la Holy Milf Rene Russo, como a Stellan Skarsgård, Idris Elba y hasta Jeremy Renner pa’ qué mash...
Cuando un film de comics es tan pero tan bueno que ni me acuerdo de sus excelentes efectos especiales y escenas de acción, demuestra que se puede mezclar ciencia ficción de fantasía comic con un buen argumento y un soberbio repertorio. De hecho, los efectos y las escenas de acción son criminales, pero repito, la fuerza del trueno de Thor está en su dirección de ritmo excelso, personajes carismáticos y su argumento sustentable. Altamente recomendable como la cartelera rural de la semana.
Film: Willy McKay (★★★★★)
___________
Barthor
